Aurelia Vélez |
Domingo F. Sarmiento |
Domingo F. Sarmiento y Aurelia
Vélez Sarsfield, hija del redactor del Código Civil Argentino, vivieron un amor
clandestino que fue, en su momento, un escándalo muy sonado. Ambos estaban
casados; él le llevaba 25 años y era amigo íntimo de su padre. Sin embargo,
nada detuvo la pasión abrasadora entre este hombre y esta mujer.
Benita,
esposa en ese entonces de Sarmiento, era una celosa feroz, y muchas veces con
motivo. Diez años menor, siempre peleó por él: por retenerlo primero; para
destruirlo después. Los acontecimientos se precipitaron cuando, a principios de
1857, Benita también desembarcó en Buenos Aires, con su hijo. No es raro que, (Sarmiento) tras poner casa y familia reunida en la misma
cuadra y vereda que los Vélez Sarsfield, en seguida descubriera las
complicidades, los pretextos, las argucias de los amantes para estar juntos con
cualquier motivo. Finalmente, ante el escándalo, abandona a su marido, quien estuvo
al lado de su amante hasta el día de su muerte.
Aurelia se volvería un
"complemento espiritual" para Sarmiento. Inclusive, fue ella misma quien
preparó la candidatura a la presidencia de Sarmiento, mientras éste se
encontraba en Estados Unidos.Los literatos la califican como una mujer "libre, amaba el conocimiento, era brillante". Asimismo, "su tiempo no le perdonó tener la espectacularidad intelectual que tenía".